El deportista catalán que este año está siendo determinante en el combinado tinerfeño regresa éste fin de semana al CN Terrassa, la que ha sido su casa desde que comenzó a jugar a waterpolo desde bien joven.

Cambiar de aires y empezar completamente de cero nunca es fácil. Justamente eso es lo que ha hecho Marc Salvador, quien tras llevar toda una vida en las filas del CN Terrassa, esta temporada decidió salir de su particular zona de confort para aterrizar en el Waterpolo Tenerife Echeyde, de la Liga PREMAAT Masculina. “Exceptuando un año que estuve cedido en el CN Molins de Rei, siempre he jugado en el mismo club desde las categorías hasta el primer equipo, por lo que tenía ganas de plantear un cambio en mi vida, buscar nuevos objetivos y aprovechar el waterpolo para crecer como persona y poder vivir nuevas experiencias. Dicho esto, pensé que el Echeyde era un cambio completamente diferente y reunía las nuevas experiencias y objetivos que estaba buscando”, explica el deportista.

Sobre la adaptación tanto a la Isla como al equipo, Salvador reconoce que ha sido “muy favorable”. “El equipo es muy humilde y me han acogido como uno más muy rápidamente, estoy muy agradecido. Desde el primer día me han ayudado en todo. Y por lo que hace la adaptación en el piso, ha estado muy fácil convivir y adaptarme a los compañeros, al ser un equipo muy joven, ha propiciado que todos nos llevemos muy bien y eso ha facilitado mucho mi adaptación”, explica el jugador catalán, quien insiste en definir al club como “humilde, y con muchas ganas de crecer deportivamente pero es obvio que no tiene el mismo presupuesto ni las mismas condiciones ni instalaciones que los demás. Aún así, es un club muy joven que está luchando para asentarse en la máxima división del waterpolo español”, añade.

Sobre lo que espera aportar al equipo este año, Salvador desvela que intentará contagiar “las ganas con las que vengo y después intentaré ayudar al equipo en todo lo que necesite, dentro y fuera del agua. Aún así, soy un jugador muy joven que le queda mucho por aprender así que veremos como avanza la temporada”, reconoce un deportista que se define como “humilde, que entrena como el que más para seguir mejorando”. Aunque ya dentro del juego se considera “una persona rápida que intenta leer el juego y asistir a trabajar por y para los compañeros”, apunta alguien que considera que a día de hoy los objetivos pasan por “luchar para sumar la mayor cantidad de puntos posibles y soñar con una posición de playoff, pero somos conscientes de nuestras limitaciones como equipo, ya que es un equipo muy joven y aún tiene que aprender a jugar todos juntos, por lo que a día de hoy hay que pensar en intentar no quedar último para evitar la promoción”, sentencia.

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