La mítica jugadora catalana, que fue un fichaje estrella de la pasada campaña para lograr el ascenso a División de Honor, emprenderá una nueva aventura lejos de la Isla

Roser Tarragó (29 años) se marcha del Tenerife Echeyde para emprender una nueva aventura en su carrera deportiva lejos de la Isla. La waterpolista catalana, toda una leyenda del waterpolo español que llevaba unos meses retirada, regresó en diciembre del pasado año a la actividad junto a Las Guayotas, con quienes logró el ansiado ascenso a División de Honor. Desde el Club se le agradece enormemente su importante ayuda para conseguir los objetivos y se le desea toda la suerte en sus próximos retos. “La temporada pasada disfruté del waterpolo de una forma diferente. Fue un placer jugar para el Echeyde y descubrir un club tan molón y cercano”, reconoce.

A pesar de no estar presente en todos los encuentros de Primera División de las tinerfeñas, Tarragó fue muy importante con sus 18 goles en 7 encuentros, marcando varios claves en las semifinales del ascenso ante el Horta y en la ida de la final frente al Canoe. “Las chicas se merecían ese ascenso y me alegro de haber podido aportar mi granito de arena a ese logro y al crecimiento del waterpolo en la Isla”, admite Roser, quien llegó a Tenerife tras una extensa y legendaria trayectoria logrando títulos nacionales e internacionales, tanto individuales como colectivos, en clubes como el Mataró o el Mediterrani en España, la Universidad de California en Berkeley, Estados Unidos (Cal Bears), además de una aventura exótica en el Drummoyne Devils de Sidney.

Con la Selección Española, fue Internacional absoluta desde el año 2010 hasta 2021, proclamándose campeona del mundo en el Mundial de Barcelona 2013, campeona de Europa en Budapest 2014 y subcampeona olímpica en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y Tokio 2020 (también estuvo en Río 2016). Asimismo, en julio de 2019 se alzó con la medalla de plata en el Mundial de Gwangju, como MVP, además de un sinfín de reconocimientos como la Medalla de Bronce y de Plata de la Real Orden del Mérito Deportivo.

Desde el Tenerife Echeyde solo tenemos palabras de agradecimiento hacia Roser por su esfuerzo, por embarcarse con humildad en esta aventura con Las Guayotas, por aportar experiencia y ser una líder dentro del agua para ayudarnos a conseguir el gran objetivo. Le deseamos toda la suerte en su próximo destino y esperamos encontrarnos pronto por las piscinas.

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