El conjunto de Albert Español lo dio todo y más en el agua compitiendo contra un superior Genesys- OSC Budapest.
El Tenerife Echeyde comenzó el partido mentalizado del nivel de exigencia que se iba a encontrar al enfrentarse al candidato a líder del Grupo E de la Eurocopa, OSC Budapest. El objetivo de hoy estaba claro, competir sabiendo que se están enfrentando a los mejores equipos del waterpolo europeo. Desde el primer pitido, nos encontramos con un Echeyde que buscaba un equilibrio de juego, poniendo difícil, sobre todo durante los dos primeros cuartos, el partido a los húngaros. Pese a ello, en la dos últimas partes, el cansancio físico y el nivel de exigencia del contrario hicieron que se esfumara toda oportunidad de igualar el marcador, finalizando el partido con un 20-11.
En el primer juego, el Tenerife Echeyde demostraba que quería quedarse en Europa, con un tanto de Diego Armando, que abría el marcador en positivo para los jugadores de Albert Español. Los húngaros comenzaron imponiendo su nivel con un contraataque limpio que anotaba su primer gol e igualaba el marcador a 1-1. Fue Ashorth quien le regaló el segundo tanto del club de Tenerife e hizo lo mismo para su equipo Simone Rossi, volviendo al empate (2-2). Durante el primer cuarto, ambos equipos jugaron intensamente en un baile de goles llegando al 5-5. Fue un tanto del húngaro Balazs Harai, en los últimos treinta segundos, el que decidió el resultado del primer tiempo quedando 6-5.
Durante el segundo cuarto, los tinerfeños intentaron mantenerse en su nivel, luchando contra los agresivos ataques del OSC que se adelantó en el marcador (7-5). Un error en la defensa contraria provocó un penalti a favor del conjunto canario, que se acercaba una vez más (7-6). Durante los primeros minutos, Diego Hernán imposibilito al OSC Budapest meter goles tras varios paradones mágicos. Sin embargo, los remates demoledores del equipo contrario dejaron al portero tinerfeño sin defensa, marcando el 9-6. Finalmente, el marcador cerró la segunda parte con un 10-7, tras un gol del jugador tinerfeño Alejandro Andión y otro del equipo rival.
Llegó el cuarto tiempo, y los potentes contraataques del OSC Budapest le dan la ventaja en el marcador (11-7). Parecía que el Echeyde volvía a la carga, cuando Albert Español anotó tres tantos que los posicionaron nuevamente en la competición (12-10). Sin embargo, la potencia física y el nivel de los jugadores húngaros salieron a la luz, dejando fuera de combate a la defensa tinerfeña y anotando los ocho goles que marcarían la diferencia final del marcador (20-11).
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