María Sagrera cuelga el gorro y se retira del waterpolo

La jugadora catalana de Las Guayotas, que llegó en la temporada 2022-2023 al Santa Cruz Tenerife Echeyde, ha tomado la decisión por motivos personales 

María Sagrera cuelga el gorro y se retira del waterpolo. La jugadora catalana de Las Guayotas le ha comunicado al Club esta decisión por motivos personales. La waterpolista llegó en la temporada 2022-2023 siendo clave en ataque y defensas en estas dos primeras en la máxima categoría. “Me da pena dejarlo, pero es una decisión que he pensado mucho y es el momento. Solo me queda darle las gracias al Echeyde y a todo el club por dos años fantásticos e inolvidables. Aquí he vivido muy buenos momentos, y con un equipo que ha sido una familia”, explica la jugadora, quien asegura que se va a quedar a vivir en la Isla, la cual siente ya como una segunda casa, y que seguro que a “algún entreno voy con las chicas para matar el gusanillo”.

La lateral-extremo de 22 años, llegada hace dos cursos desde el CN Catalunya, ha marcado un total de 28 tantos en 34 encuentros con la escuadra chicharrera. Su trayectoria comenzó a los 9 años en la cantera del CN Sabadell, donde estuvo hasta edad juvenil, momento en el que empieza un periplo de cuatro años en el “Cata”, en primer lugar jugando en Primera y, después, ya en División de Honor como pieza clave. También destacan un subcampeonato con la Selección Catalana Infantil en el Campeonato de España de Selecciones Autonómicas, además de proclamarse en categorías campeona de Cataluña y España con el Sabadell. “El Echeyde era mi primera aventura fuera de casa y no me arrepiento para nada. Me he sentido acogida y me llevo amigas para toda la vida. Siempre seré una Guayota”.

Desde el Santa Cruz Tenerife solo podemos darle las gracias a María Sagrera por su trabajo, esfuerzo, sacrificio y por ser una pieza importantísima para nuestro equipo femenino en su aventura en la élite del waterpolo nacional. Para nosotros ya es un chicharrera más y esta siempre será su casa. Han sido dos grandes años, en los que deja una bonita huella. Desearle toda la suerte en su nueva etapa alejada de las piscinas. Las puertas del Echeyde siempre las tendrá abiertas.